miércoles, 28 de mayo de 2008

Pagando deudas

Mi ética indica que si espero que lean mi nuevo texto, lo mínimo que les debo son mis comentarios atrasados:

Lorenza, por fin sparagmosée su texto. Pase usted a ver mis sádicas disecciones y contribuciones. Perdone la tardanza pero primero usted, yo y el teléfono. Luego este ímpetu egoísta de la pluma propia. Luego cocinar, el trabajo y esas mundaneidades.

Qué horror, ya me tienen hablando de usted.

(Ves Pablo, no es necesario ser erudito en un tema para jugar –yo cachondeo con el latín de estos letreros queridísimos y admirados-, anímate: cualquier crítica es válida si sabes sostenerla ¿o acaso todos los lectores deberían de estudiar letras? ¡Qué triste mundo sería! )

Espero comentar mañana los de Pablo y pagar mi deuda con Karlik y su primer hijo (los mentados puntos tan prometidos; pero no te puedes quejar, a lo que has subido aquí le he puesto toda mi atención).

*Oigan, mi último post (“Nada que declarar”) corresponde al segundo ejercicio, pero está abierto al sparagmos también, si quieren complacerme con la atención debida al primero (que no entregué…mala niña que soy)

1 comentario:

Pablo Martínez Zárate dijo...

De acuerdo, juguemos. Tal vez no estoy acostumbrado a ello, no tengo mucho tiempo de dar a leer y menos aún de leer así, con fines de análisis. .... ¿Hablas de un mundo de lectores sólo literatos? ¿Por qué pones esa idea en mi cabeza? ¿Acaso no sabes que ya de por sí sufro insomnio? :) ....no no, me gusta, aprendo mucho y me divierto. Y más allá de las paranoias, en particular el asunto de la descuartizada mutua y sistemática me parece maravilloso. Hacerlo ante literatos, no obstante, aterrador. No me mal interpreten, por supuesto que me gusta también por eso! En fin, aquí seguimos mientras no me corran. Probablemente me quede dormido, si ronco me dan un zape.